En estas vagas escrituras,
de tu cuerpo alucinógeno,
creyendo amar lo que no amo,
tasando gotas que no bebo,
escupo el sudor de lenguas enrolladas por espasmo,
y me siento virgen al paso chorreando tu cuerpo en las escaleras crónicas,
de abundancia.
Me como pedazos inertes,
y diacrónicos,
abro mis piernas, y maúllo,
lloro y resucito,
con la carne adolorida de frente sudada,
que tanto amé de ciega actriz.
Y no quiero que hoy,
con tus falsas ciencias,
me llames amante,
me subas para hacer montajes,
de protagonista porno.
porque es simple y sarcástico,
que el amor no se endulza,
con el semen pegoteado,
en sexos unidos de placer.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario